Antes de empezar a escribir La Senda de la Estampida tomé la decisión de utilizar el mayor número de localizaciones reales en la historia. Aunque desde un principio tuve claro que el centro de la misma sería el Parque Nacional Denali, el papel que jugaría Healy dentro de la trama sería crucial. Para ello dediqué gran parte del proceso de documentación a proveerme de la mayor cantidad de información posible sobre el pueblo.
Vista panorámica de la cordillera central de Alaska desde Healy
La mayor parte de los lugares que aparecen en la novela son reales. Desde el Magic Bus y su historia sobre Chris McCandless hasta el restaurante de Rose’s y su famosa hamburguesa Grizzly, un lugar muy popular entre los visitantes de la zona. Los únicos lugares ficticios, cuya existencia sólo es tal en la historia, son el abominable hostal Nenana Lodge, el puesto de la Policía Estatal en Healy y Betty’s, restaurante rival de Rose’s.
Pese a que en un primer momento Healy puede parecer un lugar aislado e inhóspito para alguien no originario de Alaska, lo cierto es que es uno de los lugares más populares entre propios y foráneos. Se encuentra en la vía con mayor volumen de tráfico de todo el estado, la Autopista Interestatal 3 George Parks, entre las dos ciudades más populosas del estado, Anchorage (300.000 habitantes, situada a 420 kilómetros al sur) y Fairbanks (33.000 habitantes, a 170 kilómetros al norte). Ese detalle, añadido a que es el núcleo urbano más cercano al acceso principal al Parque Nacional, lo convierten en un dinámico lugar, dedicado mayoritariamente al turismo de naturaleza.
Autopista Interestatal 3, en las proximidades de Healy
Aunque la extensión del término municipal sea de 1734 km2 (mayor que la isla de Fuerteventura) y su población de sólo 1021 habitantes, posee numerosos alojamientos turísticos rurales (algunos tan espectaculares como el Denali Dome Home Bed and Breakfast), así como varios negocios dedicados a los deportes de aventura o rutas organizadas en la naturaleza.
Convoy ferroviario detenido en Healy
Existen tres formas de llegar a Healy. Una es por carretera a través de la George Parks, la segunda es gracias al Ferrocarril de Alaska, cuya línea férrea entre Anchorage y Fairbanks transcurre por las inmediaciones de Healy. Aunque en Healy no hay estación uno se puede apear en Healy solicitando previamente la parada al personal del tren (al igual que para tomarlo sólo hace falta esperarle al lado de la vía en determinados lugares del recorrido y hacerle señas para que pare. Parece ser que en Alaska es habitual ser recogido por los trenes simplemente haciendo autostop). La tercera y última opción es la aérea (la utilizada por Dellmonico y Finney), llegando en uno de los vuelos domésticos chárter o regulares que operan a través de la pequeña pista de Healy, y que conecta al pueblo con las principales ciudades del estado.
Aeropuerto de Healy (centro). Se puede observar la central térmica a la izquierda, al otro lado del río Nenana. A la derecha del aeropuerto, línea férrea Anchorage-Fairbanks
Nuestra ruta por los lugares más emblemáticos de Healy nos llevará en primer lugar a la central térmica de Healy, muy próxima al aeropuerto y también a orillas del río Nenana, que se encarga de suministrar electricidad a gran parte del centro de Alaska. Casi sin darnos cuenta el Distrito del Lobo, situado al oeste del pueblo, nos irá atrayendo a través del disperso núcleo de Healy, encontrando la carretera de la Estampida (Stampede Road) prácticamente por casualidad gracias a un escueto indicador que encontraremos en un desvío de la interestatal a la salida del pueblo, camino de Fairbanks.
Senda de la Estampida en las proximidades del Magic Bus
Durante los primeros kilómetros la carretera de la Estampida es una vía pavimentada, con dos carriles bien diferenciados que permite llegar con comodidad llegar a alguno de los aislados vecindarios de los suburbios de Healy, como el de Antares Lane, pero si nos mantenemos en la carretera de la Estampida en su ruta hacia el oeste, no tardaremos en comprobar que el asfalto da paso a la tierra compactada, convirtiéndose en la Senda de la Estampida.
Indicador del desvío hacia la carretera de la Estampida (Stampede Road)
El trazado de esta pista forestal se ve salpicado de viviendas aisladas que van desapareciendo gradualmente según nos alejamos de Healy en dirección oeste, hacia las primeras estribaciones del macizo del Denali, ya en pleno parque nacional. A lo largo de unos cuarenta kilómetros, la Senda atraviesa inmensas extensiones de matorral y bosques de coníferas, donde se pueden encontrar algunas pequeñas masas de agua, como el lago Eightmile. Unos kilómetros más adelante, tras vadear algunos ríos de montaña llegaremos al Magic Bus, escenario que juega un papel fundamental en la historia. Llegados a este punto, se puede elegir entre tomar una de las muchas rutas de senderismo que parten desde este lugar hacia el interior del parque nacional o retornar de nuevo a Healy atravesando de nuevo el distrito del lobo.
Magic Bus
Eligiendo la segunda opción se puede hacer un pequeño tour por Healy. Una de las paradas favoritas de los turistas en el pueblo es Otto Lake, donde es muy popular practicar deportes acuáticos durante los meses de verano. También podemos visitar algunos lugares emblemáticos de Healy, como la cámara de comercio de Denali, que realmente es una especie de oficina de turismo, alguna de las varias iglesias cristianas del pueblo (en Healy hay cuatro iglesias diferentes para una población de mil habitantes aunque ninguna de ellas es ortodoxa rusa, la confesión mayoritaria de la población nativa de Alaska) o los bares y restaurantes de la zona.
Ford Expedition de la Policía Estatal de Alaska
Tras pasar junto al parque de bomberos voluntarios y el centro comunal llegaremos a la tienda de licores de Healy, junto a la interestatal George Parks, que también es un supermercado muy concurrido por turistas de paso. Siguiendo de nuevo la interestatal hacia el norte llegaremos a Rose’s, quizá el restaurante más emblemático del pueblo y también escenario de algunos pasajes de la historia. Es este un restaurante pequeño pero acogedor de una sóla planta, con una carta donde podremos encontrar una selecta variedad de comida rápida, tan típica de estos establecimientos norteamericanos localizados en áreas de servicio. El plato estrella principal de la carta es la enorme hamburguesa Grizzly, de cinco libras de carne de vacuno (dos kilos y medio), que es también el reto culinario del local.
Rose´s
Una vez llenado el estómago tenemos varias opciones, según la época del año. Se puede practicar la pesca del salmón en alguno de los numerosos arroyos que discurren por las inmediaciones del pueblo, o visitar el centro de visitantes del acceso principal al Parque Nacional Denali, a unos doce kilómetros de Healy y localizado también junto a la interestatal George Parks. Es esta una carretera cuya ruta ofrece unas magníficas vistas del macizo de Denali y de la cordillera centra de Alaska, donde es habitual cruzarse con todo tipo de fauna autóctona, como caribúes, alces, osos grizzlies e incluso lobos.
Panorámica del monte Denali
Tras visitar el parque existen dos opciones, dirigirse al sur en dirección a Anchorage para llegar a la costa, donde abundan los paisajes típicos de postal de Alaska, muy similares a los de los fiordos de Noruega o los valles alpinos de Suiza, o dirigirse al norte, visitando el valle del Yukón y parando para hacernos una típica foto junto al indicador del Círculo Polar Ártico, justo antes de penetrar en las inmensas extensiones de tundra que dominan el norte de Alaska.
Macizo del Denali visto desde la Senda de la Estampida
Es este un viaje que no deja indiferente a nadie y es cada vez más popular entre los que visitan Alaska, ya que sigue siendo uno de los entornos naturales que mejor se conservan en la que sigue siendo la última frontera del norte.
Macizo del Denali
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La Senda de la Estampida 